Hace poco leí una fábula que me encantó. Haré mi mejor esfuerzo para resumir aquí.
Un sabio salió a recorrer parajes lejanos con su discípulo. Después de recorrer mucho llegaron a una casa muy humilde donde vivía una familia de gran corazón.
El sabio le pidió al discípulo que tocara la puerta y pidiera hospedaje.. Aunque era una familia muy humilde no dudaron en decir que sí inmediatamente.
Esta familia tenía una vaca que les producía leche y con ella hacían queso que vendían en el mercado para subsistir.
Tres días más tarde se despidieron de la humilde familia.
Llegando a la esquina el sabio le dijo a su discípulo que se devolviera y matara a la vaca. el discípulo muy sorprendido le pidió al sabio que no hiciera.
El discípulo no tuvo opción y regresó e hizo lo que le habían ordenado.
Muchos años más tarde el discípulo y el sabio volvieron a aquella casa que ya no era tan humilde. El pueblo había mejorado mucho. Habían construido un hotel y un mercado.
Cuando el sabio preguntó, al hijo mayor de la familia qué había sucedido en los años pasados, el chico contó que alguien había matado la vaca y tuvieron que reinventarse para poder subsistir y salir de su crisis económica.
¿Cuántas veces te han matado tu vaca?… ¿Has sido tú la vaca de alguien? ¿Cuánto cuesta quedarse pegado a una vaca? ¿Cuánto cuesta matar a una vaca y reinventarse?